El ejercicio físico se ha convertido en un punto de inflexión para muchas personas que buscan mejorar su bienestar, y en los últimos años esa tendencia ha ganado fuerza entre artistas que antes apenas tenían tiempo para cuidarse. El equilibrio entre la exigencia profesional y la vida personal ha llevado a varios músicos a replantearse sus hábitos, dejando atrás costumbres poco saludables y descubriendo en la actividad física una nueva forma de estabilidad.
En ese contexto, Ed Sheeran ha encontrado en el entrenamiento diario un modo de recuperar el control sobre su cuerpo y sentirse mejor consigo mismo.
Cuestión de constancia
Ed Sheeran se propuso ponerse en forma y cambiar sus hábitos
Durante una charla con Andy Cohen en el programa Small Stage Series de Sirius XM, el cantante explicó que el cambio comenzó tras darse cuenta de que había ganado bastante peso. “El año pasado había ganado bastante peso y pensé: Voy a darle duro al gimnasio e intentar perder unos kilos”, comentó, recordando que nunca había tenido abdominales y que se propuso ver hasta dónde podía llegar.
Su objetivo era claro, aunque no tan fácil de cumplir. “He estado bastante tiempo en esto, pero pensé: Voy a ver si puedo lograrlo”, contó entre risas. Aun así, reconoció que mantener la constancia no siempre resulta sencillo. “Sigo fastidiándola, porque cuando salgo pienso: Voy a tomarme un par de cervezas, y claro...”, admitió, dejando entrever que la disciplina diaria sigue siendo su mayor desafío.
La salud se convirtió en su prioridad tras dejar el tabaco
Sheeran añadió que, a pesar de esas dificultades, se encuentra en un momento físico muy positivo. “Diría que todo va bien. Siento que estoy en la mejor forma de mi vida”, aseguró. El proceso no es nuevo para él: en 2019 ya había perdido unos 23 kilos tras dejar de fumar y empezar a correr con frecuencia.
Entonces explicó en el pódcast Behind the Metal que la decisión surgió al notar las consecuencias del tabaco en su cuerpo. “Dejé de fumar hace tres años y desde entonces empecé a hacer ejercicio. Me encanta”, recordó, destacando que eligió el deporte al aire libre antes que los gimnasios. “No hay nada como el aire fresco para limpiarte de verdad”, resumió.
Con el tiempo, ese hábito se consolidó hasta convertirse en una parte esencial de su día a día. Y, aunque todavía no ha alcanzado su meta de tener un abdomen marcado, ha conseguido algo más importante: recuperar una sensación de energía que había perdido.

