El joven de 19 años, detenido el pasado 14 de julio en Errenteria (Gipuzkoa) y que estaba en prisión preventiva en la cárcel de Martutene de San Sebastián, acusado de la agresión a un hombre mayor en Torre Pacheco que desencadenó la ola de disturbios racistas ese mes en el municipio murciano, ha quedado en libertad provisional.
Según fuentes del Departamento de Justicia del Gobierno Vasco, la puesta en libertad del joven se produjo el pasado viernes a última hora de la tarde, por orden judicial, y con ciertas medidas cautelares. Entre éstas, la prohibición de aproximación a menos de 500 metros y comunicación con el perjudicado, la prohibición de acudir o residir en el municipio de Torre Pacheco, la retirada del pasaporte, la prohibición de salida del territorio nacional, y comparecencias semanales para el investigado, según informa el Tribunal Superior de Justicia de Murcia.
El Ministerio Fiscal, único acusador, no solicitó a la jueza instructora de San Javier, partido judicial al que pertenece Torre Pacheco, la ratificación de la prisión provisional inicialmente acordada por el juzgado de San Sebastián tras su detención.
El joven, de origen marroquí, fue detenido por la Guardia Civil en Errenteria cuando al parecer trataba de huir a Francia, después de haber agredido presuntamente el 9 de julio a un vecino de Torre Pacheco de 68 años. Esta agresión fue el detonante de los violentos disturbios racistas que se registraron durante varios días en ese municipio de Murcia.
El Juzgado de Instrucción número 5 de San Sebastián, en funciones de guardia, decretó el ingreso en prisión provisional y sin fianza del presunto agresor, acusado de un delito de lesiones, aunque acordó remitir el procedimiento a los juzgados de San Javier, partido judicial al que pertenece Torre Pacheco.
Una condena mientras estaba en prisión provisional
Durante su estancia de casi tres semanas en la cárcel de Martutene, en la que ingresó el pasado 15 de julio, el joven fue juzgado y condenado a un año de prisión por un intento de robo con violencia a un anciano de la misma población dos días antes, en un juicio rápido de un juzgado de Cartagena ante el que declaró por videoconferencia desde el penal vasco.
Críticas de PP y Vox
Dirigentes tanto del Partido Popular como de Vox han criticado la puesta en libertad del joven. El presidente del Gobierno de la Región de Murcia, Fernando López Miras (PP), ha calificado este hecho de “intolerable”. ”Las leyes deben ser duras con los delincuentes. No puede permitirse que tras agredir de manera brutal a una persona indefensa y teniendo antecedentes, quede en la calle. Necesitamos leyes que nos protejan y garanticen la seguridad”, ha dicho el presidente en su cuenta de la red social X.
En esa misma línea, la portavoz popular en la Región de Murcia, Miriam Guardiola, ha exigido a Pedro Sánchez “endurecer las leyes urgentemente para que no se repita lo ocurrido con el agresor reincidente de Torre Pacheco”. ”No puede ser que alguien con antecedentes vuelva a agredir y quede libre como si nada. Es una humillación para la víctima y una amenaza para todos”, ha señalado Guardiola, que ha reclamado al Gobierno de España “una respuesta contundente porque las leyes no pueden seguir siendo laxas con quienes reinciden una y otra vez”.
Por otra parte, el líder de Vox, Santiago Abascal, ha pedido que al agresor “lo lleven a La Moncloa, a las saunas” del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, o “a las casas de los defensores de la invasión” migratoria, e incluso “a Génova 13, a donde sea”. “No hay derecho a que nuestros abuelos sufran las consecuencias de las políticas suicidas de toda esa patulea de traidores a nuestros pueblos”, ha apuntado tanto en alusión al PP como al PSOE.