Poco antes de verse por primera vez con el president Salvador Illa en la delegación de la Generalitat en Bruselas, Carles Puigdemont se ha reunido con el abad de Montserrat, Manel Gasch, en la llamada Casa de la República en Waterloo, aprovechando que el eclesiástico se encontraba en la capital belga para la inauguración de una exposición sobre el milenario del santuario catalán que el Parlamento Europeo acogerá hasta el 4 de septiembre.
Según ha manifestado el expresidente de la Generalitat en su cuenta de X, ambos han podido compartir “un buen rato hablando de los valores humanistas y cristianos que han hecho de Montserrat el referente de tantas y tantas generaciones, y por supuesto de la lengua catalana y de Catalunya”.
El encuentro del abad con Puigdemont en Waterloo tiene lugar algo más de dos meses después de que los reyes Felipe y Letizia acudieran a finales de junio al monasterio de Montserrat también con motivo de su milenario, visita que provocó indignación en el independentismo y una airada reacción del presidente de Junts.
El posconvergente la tildó de “provocación” y vio en ella “parte del plan para españolizar el país”, y del que “son conscientes tanto en Madrid como a ambos lados de la plaza Sant Jaume que colaboran con entusismo”, en referencia a la Generalitat y al Ayuntamiento de Barcelona, gobernados por el PSC.
Gasch también se ha reunido este mediodía en las dependencias del Parlamento Europeo con los vicepresidentes de la cámara Javi López (PSC) y Esteban González-Pons (PP), acompañado del comisario de la exposición del milenario.