Superar una enfermedad como el cáncer no es solo un desafío médico, sino un viaje emocional lleno de altibajos. En ese proceso, los pequeños gestos pueden marcar la diferencia y dar fuerzas para continuar. Manu Sánchez, uno de los presentadores más conocidos de Andalucía, compartió recientemente en el programa Somos Música de Canal Sur cómo uno de esos gestos lo marcó profundamente.
Todo ocurrió poco después de que Manu Sánchez hiciera público su diagnóstico. “Yo lo conté porque sentía que era necesario. Acababan de decírmelo y era un momento muy difícil”, recordó emocionado. Por aquel entonces, Manuel Carrasco, uno de los cantantes más destacados del panorama musical, tenía programado un concierto en el estadio de La Cartuja de Sevilla.
Mención especial
Manuel Carrasco fue un gran apoyo para el presentador
El espectáculo, que reunió a 74.345 personas, sería el más multitudinario de su carrera. A pesar de la magnitud del concierto y de la presión que conlleva, el cantante tuvo un detalle que Manu nunca olvidará.
Durante el concierto, Carrasco dedicó unas palabras a Sánchez, mencionándolo ante una multitud que, al escucharlo, rompió en un aplauso. “Fue impresionante. Que te acordases de mí ya fue increíble, pero que toda esa gente reaccionase de esa forma... No puedes imaginar lo que significó y lo mucho que me ayudó”, confesó el presentador entre lágrimas mientras abrazaba al artista
Manu Sánchez, que prefiere no usar términos como “lucha” para referirse a su proceso, describió el camino como “largo y lleno de curvas” porque “es muy duro”. Sin embargo, destacó la importancia de los amigos como el cantante onubense que están presentes en esos momentos difíciles: “Te das cuenta de quiénes son de verdad. Gente que te da la mano y no te suelta”. Estas palabras reflejan su manera de afrontar el cáncer, paso a paso, con el apoyo de quienes lo rodean.
Una señal del destino
La presencia constante de Manu Carrasco
De forma paralela, Manu compartió una de las experiencias más duras de su proceso: las horas previas a una operación crucial tras una quimioterapia intensa. Los médicos habían sido claros con los riesgos. “Lo más probable es que no salgas de la operación”, le advirtieron, añadiendo que, en caso de sobrevivir, lo esperaban secuelas devastadoras. Ante esta perspectiva, Manu llegó a hacer los preparativos necesarios para dejar todo en orden: “Ya había ido al notario para repartir los bienes que debía”.
Finalmente, la intervención se llevó a cabo. “Cuando desperté, había pasado de esto de la tele a la realidad. De la purpurina a alguien que estaba lavándome con una manopla”, recordó. El presentador describió cómo, al abrir los ojos, vio unos brazos tatuados con letras de canciones de Manuel Carrasco, incluyendo No dejes de soñar. El gesto lo conmovió profundamente y reforzó el vínculo que ya tenía con el cantante. “Esa persona maravillosa de nuestra sanidad pública me hizo sentir que todo tenía un sentido”, concluyó.