La maquinaria de First Dates se volvía a poner en marcha este lunes, 12 de mayo, para recibir la visita de Raúl (51), un conductor de Barcelona que había decidido presentarse al programa de Cuatro presentado por Carlos Sobera para encontrar a una compañera de viaje con la que poder explorar una relación alejada de lo convencional.
''Lo tradicional no va conmigo. Llega un momento en el que sientes la monotonía y quieres algo que salga de ahí'', declaraba. Quería conocer a una mujer capaz de entender el mundo de la relaciones de la misma manera que él. ''Que no esté todo el rato llamando. Quiero una persona abierta para que cada uno pueda hacer con libertad lo que quiera sin mentiras'', aclaraba.

Raúl en 'First Dates'
Y la elegida para cenar con él era Sonia (52), una empresaria de Barcelona que volvía a repetir experiencia en First Dates. Su concepto del amor encajaba a la perfección con el de Raúl. ''Creo en el concepto de pareja abierta. Creo que es el futuro de una relación estable. Me gustaría encontrar que a ese hombre que sin mediar palabra me diera un beso que me dejara sin aliento'', confesaba.
Momentos después, se producía el esperado encuentro entre Sonia y Raúl. ''No me ha gustado, me gusta un hombre más varonil, que ya de entrada impresione'', sentenciaba. Tras intercambiar sus primeras palabras, los solteros comenzaban la velada hablando del tema estrella: su sexualidad. ''Soy un hombre del ambiente liberal'', reconocía el soltero a la vez que explicaba cómo fue su primera experiencia sexual con una pareja.

Sonia y Raúl en 'First Dates'
Pero conforme avanzaba la velada, Sonia iba cada vez descubriendo detalles del soltero que no encajaban del todo con su personalidad. ''Llevo años yendo a la 'meca''', contaba él sobre el pequeño pueblo francés enfocado única y exclusivamente en el sexo. ''Cada año voy cinco o seis veces. Como si fuera una enfermedad o una adicción'', declaraba él. ''Yo irme cinco veces al año a esa urbanización masificada a mí no me gusta'', sentenciaba ella.
Y es que la catalana no estaba por la labor de compartir su vida con una persona que estuviera enfocada exclusivamente en ese ambiente. ''No viven por ejemplo la sexualidad con su pareja sin necesidad de terceros. El ambiente liberal me ha permitido hacer realidad fantasías porque en teoría es más fácil, pero no es la base de mi vida sexual. Mi vida no gira en torno a esto. No me gusta ir a un pueblo donde la gente pasea por el paseo marítimo desnuda o atada'', aseveraba.

Sonia y Raúl en 'First Dates'
En la recta final, los solteros volvían a demostrar que, a pesar de compartir conceptos parecidos del amor, lo suyo estaba destinado al fracaso. ''Hay ciertas cosas que no entiendo del todo de ella, pero su personalidad me va bien porque no me juzgaría'', reconocía él. ''Yo creo que no necesita una pareja. Busca una compañera de juegos para el ambiente liberal'', sentenciaba ella. Finalmente, Sonia rechazaba una segunda cita, pero dejaba la puerta abierta una posible amistad.