Encontrar el amor en First Dates no es nada fácil. El equipo del programa de Cuatro intenta cada noche emparejar a distintas personas en citas a ciegas con el objetivo de que entre ellos surja una conexión real. Pero la química no surge por arte de magia: depende, en gran medida, de las impresiones que cada uno se lleva durante los primeros segundos de ese primer encuentro.
Y la primera impresión de Pilar (69) no fue, ni de lejos, la mejor de la noche del miércoles. Su cita era Florindo (68), un vigilante de seguridad jubilado de Porto de Sanabria (Zamora) al que le encantaba vivir en el campo. ''Llevo allí 4 años. Vivía en Barcelona. Allí trabajé en el museo Picasso. Conocí a muchos famosos. Harrison Ford dejó un pastizal de propina, 1.000 euros'', contaba.
Pilar en 'First Dates'
En el amor, se definía como un hombre bastante mujeriego. ''Me gusta la noche. He tenido muchas batallas con las mujeres. Tengo mucha palabra y en aquellas época era fácil engañar. Es muy difícil que me enamore. No me he casado y no me voy a casar con 68 años'', recalcaba. Momentos después, entraba por la puerta la empresaria jubilada de León.
''No está mal. Tiene buenas piernas. Es más alta que yo, pero a mí me gustan las mujeres con las piernas largas'', confesaba el soltero. La conversación fluyó sin problema. Pero la situación dio un giro radical cuando Florindo explicaba que vivía en la montaña. ''Yo no soy de andar mucho. No me gusta vivir en el monte, soy de capital. Lo llevaría mal'', afirmaba ella. Por si esto no fuera poco, el físico del soltero tampoco era de su agrado: ''No me acaba de gustar, no es mi tipo''.
Pilar y Florindo en 'First Dates'
Poco después, el presentador acompañaba a la pareja hasta su mesa, donde comenzaban la velada poniéndose al día de sus vidas. Pilar quiso explicarle que estuvo casada 12 años con el padre de su hijo. ''Soy abuela'', añadía. Una confesión que hacía enfurecer al soltero: ''Lo de las abuelas es complicado porque vas a estar con tu nieto''. ''En mi caso, no'', dejaba claro ella. ''Los nietos no me hacen mucha gracia porque te rompen la baraja'', sentenciaba él.
La soltera se llevaba otro disgusto al descubrir que su cita era un hombre de pocas relaciones serias. ''Soy mujeriego, me encanta el sexo y la pasión'', reconocía. ''Yo con eso no puedo. No tengo ningún interés en tener sexo con él'', dejaba claro ella. Por si fuera poco, el soltero también reconocía que la noche era su perdición. ''Me gusta la fiesta'', decía. ''Trabajé tanto en las discotecas que acabé harta. Quiero una vida tranquila'', sentenciaba ella.
Pilar y Florindo en 'First Dates'
Tras protagonizar un incómodo baile al ritmo de Isabel Pantoja en el reservado del programa, los solteros se volvían a ver las caras en la decisión final. ''Yo sí quiero una segunda cita porque tiene cosas que me agradan bastante, sobre todo su forma de ser'', declaraba Florindo. ''Yo lo siento, pero no. Vives en el monte y me gusta la capital. Y también lo de la fiesta. Lo respeto, pero no estoy por la labor de seguir tu ritmo'', concluía ella.

