Japón es un referente mundial por haber logrado transmitir su identidad a través de la cocina. Inspirados por ese mismo camino, Carme Ruscalleda y Joan Roca aterrizaron en Tokio para contar la historia de Catalunya a través de sus sabores más auténticos.
Con una cena organizada por la Agència Catalana de Turisme en el Hotel Ritz-Carlton, empezó el viaje del president Salvador Illa a Japón. En cocinas abiertas, con pantallas gigantes mostrando cada paso, los chefs prepararon platos típicos con su propio toque creativo.
Carme Ruscalleda cocinó sardinas esmarris
Carme Ruscalleda presentó bombas de la Barceloneta, calçots en su salsa, sardinas esmarris, trinxat de la Cerdanya, judías de Santa Pau con merluza, romesquet de mar y tierra, suquet de pescado y un original xuixo con pato a la naranja. Joan Roca, por su parte, se adentró en el mundo dulce con un postre de leche de oveja texturizada, crema catalana con manzana, torrijas de Santa Teresa y mazapán con piñones.
Los chefs no fueron elegidos al azar, ambos tienen una relación especial con Japón. Carme Ruscalleda recordó que Joan Roca participa a menudo en eventos gastronómicos en Tokio y es un gran fan de la cocina japonesa. Ella misma tuvo el restaurante Sant Pau Tokio, que cerró en 2023 tras casi veinte años.
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Este encuentro gastronómico fue solo el inicio de un viaje oficial que llevará a Illa por otras ciudades japonesas como Kobe, Kioto y Osaka, donde Catalunya participará en la Exposición Universal.