Basándose en una revisión sistemática, Ultra-Processed Foods and Risk of AllCause Mortality: An Updated Systematic Review and Dose-Response Meta-Analysis of Prospective Cohort Studies, publicada este año en varias revistas médicas de prestigio, Nutrimedia ha resuelto que las dietas ricas en ultraprocesados se asocian con peores desenlaces en salud.
La web de información científica sobre alimentación y nutrición impulsada por Cochrane Iberoamérica y la Universitat Pompeu Fabra se propuso averiguar la veracidad del mensaje “el consumo habitual de alimentos ultraprocesados es perjudicial para la salud”, repetido hasta el hartazgo en los medios de comunicación nacionales e internacionales. Y el resultado, aseguran, “es coherente con las recomendaciones sanitarias de reducir el consumo de ultraprocesados, una medida que tiene mayor impacto cuando se aplica a nivel poblacional”.
El mensaje es coherente con las recomendaciones sanitarias de reducir el consumo de ultraprocesados
Sirviéndose de la revisión mencionada y de dos guías alimentarias recientes —son el Informe del Comité Científico de la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN) sobre recomendaciones dietéticas sostenibles y recomendaciones de actividad física para la población española y Pequeños cambios para comer mejor, de la Agència de Salut Pública de Catalunya—, se observó que existía un mayor riesgo de mortalidad por cualquier causa entre las personas con mayor consumo de alimentos ultraprocesados.
Esta nueva evaluación se sirve de un mayor número de estudios y participantes que otras anteriores realizadas por Nutrimedia, con seguimientos más prolongados. Además, todos los trabajos incluidos utilizan la clasificación NOVA para identificar los alimentos ultraprocesados, que los estructura en cuatro categorías: alimentos no procesados o mínimamente procesados, ingredientes culinarios procesados, alimentos procesados y alimentos ultraprocesados.

Los ultraprocesados están cada vez más presentes en la dieta de niños y adultos
No obstante, admite el organismo, los estudios elegidos para responder a esta cuestión son exclusivamente observacionales, con importantes limitaciones metodológicas. “Por ello, la certeza de los resultados en relación con la mortalidad por cualquier causa sigue siendo baja, a pesar de que se haya identificado un gradiente dosis-respuesta. En consecuencia, el mensaje analizado se mantiene como ‘posiblemente cierto’”.
Nutrimedia señala que para reducir la incertidumbre y poder ofrecer una respuesta sólida, es necesario impulsar más y mejores estudios sobre este tema, especialmente en países de ingresos bajos y medios, pero insiste en que el resultado de esta evaluación no contradice las recomendaciones de instituciones nacionales e internacionales, que aconsejan reducir el consumo de estos productos.
“De hecho, es a nivel de población donde esta estrategia puede tener un impacto más positivo y especial sentido”, concluye.