Es un plato que tiene siglos de antigüedad, pero sigue estando presente en la mayoría de casas y restaurantes. Puede ser una tapa, un bocadillo, un plato completo o un capricho, pero siempre es un verdadero “fondo de armario” de nuestra gastronomía. El hecho de que tenga fama de potente o de engordar no ha cambiado su popularidad. Pero la doctora Magda Carlas tiene ciertos trucos para hacerla más ligera.
La doctora explica que “la tortilla de patatas no sólo es un elemento calórico para hacer el aperitivo, sino que es un alimento nutritivo con proteínas de alta calidad, carbohidratos, fibra y vitaminas. 300 kilocalorías, pero siempre en función de cómo se haya hecho”.
Hay platos mucho más energéticos que la tortilla de patatas. 100 gramos de tortilla de patatas puede oscilar entre las 250 y las 300 kilocalorías”
Y es que las patatas son menos energéticas y más nutritivas de lo que pensamos. “La patata frita aporta más de 300 kilocalorías, pero hervida o al vapor no llega a las 80. Además, si las tomamos frías, el efecto metabólico es distinto”.
Quizá por eso vale la pena probar la tortilla light que propone la doctora. “Se puede hacer una tortilla de patatas con los mismos ingredientes, pero con patata hecha con piel en el horno y sin freír. La patata sabe y la tortilla es mucho más ligera y digestiva”.
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Se puede realizar una tortilla de patatas con los mismos ingredientes, pero con patata hecha con piel al horno y sin freír. La patata sabe y la tortilla es mucho más ligera y digestiva“
Según la doctora, la receta incluye dos huevos y una patata media por persona, con el aceite justo. Si queremos cebolla, ponemos una para toda la tortilla.
Este artículo fue publicado originalmente en RAC1.