El calabacín es una de las hortalizas más consumidas en España y en toda la costa mediterránea, ya no solo por su versatilidad en la cocina, sino también por los beneficios que aporta a nuestro organismo. Y es que esta verdura verde y alargada tiene un contenido de más del 90% de agua y un bajo aporte calórico, tal y como se ha desprendido de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU).
La verdura, además, entraña una gran ventaja que hace que su consumo sea aún mayor: la gran cantidad de recetas en las que se puede añadir. Y no solo eso sino que se trata de un alimento que se puede tomar durante todo el año, según los calendarios de verduras creados por los expertos.
El cocinero Joseba Arguiñano, por su parte, ha incidido en esta verdura y la forma de cocinar sus flores en casa de forma rápida y sencilla. Lo ha hecho en un vídeo publicado en la red social Instagram, en el que también ha profundizado en algunas curiosidades del alimento.
Curiosidades del calabacín
¿Sabías que algunas frutas y verduras tienen género? El pimiento es una de ellas y dependiendo de si es macho o hembra su uso en la cocina será distinto. Arguiñano, por otro lado, ha confirmado que el calabacín es otro de estos ejemplos, aunque en este caso son sus flores las que pueden ser masculinas o femeninas.
“Las masculinas son las que crecen al final del tallo y no dan fruto”, ha explicado el chef en el metraje, de algo menos de un minuto de duración. Las femeninas, en otra instancia, “son las que tienen en calabacín creciendo detrás de la flor”, ha señalado, al respecto.
Esta flor, que ya se puede comprar por separado en cualquier supermercado, tiene una apariencia distinta en función de su género, siendo la masculina algo más grande y alargada que su contraria. Otra diferencia, asimismo, se encuentra en la forma en la que se puede cocinar el producto.
Cómo cocinar una flor de calabacín
Estas flores tienen una utilidad muy extendida en la cocina. Y es que “son tan finas que son perfectas para rellenar”, ha señalado Arguiñano. “Hay que andar muy suave porque si las abres mucho se rompen”.
“Para preparar recetas con flores de calabacín, es clave quitar el pistilo de la flor femenina antes de rellenarlas”, ha apostillado el cocinero. De hecho, el motivo se debe a que esa parte suele aportar un sabor amargo a los platos.
El truco, entonces, está en tomar una tijera y con delicadeza cortar justo en la parte del pistilo. “Ahí tenéis el pistilo, lo abrís con mucha sutileza porque la flor es tan delicada que se rompe, entonces la abrís suave, la sacáis y la retiráis”, ha sentenciado el chef.


