Es un placer empezar esta Newsletter, que repasará cada viernes la actualidad rosa, sin tener que hablar mucho de Kanye West. Solo lo justo. Para ser justos con él. Después de jugar al escándalo tras escándalo desde el no vestido de los Grammy, el rapero se ha calmado e incluso ha vuelto a X para anunciar que, tras una profunda reflexión, ya no es nazi. Bianca Censori ha aplaudido esta revelación.
“Como siempre he dicho, mi marido Ye, es un hombre bueno, defectuoso como todos los demás, pero con un corazón que busca la verdad”, aseguró el jueves. Y añadió en su publicación una frase que, al menos, da que pensar. “Estoy agradecida de que haya hablado por sí mismo, y estoy a su lado mientras sigue aprendiendo, mejorando y creciendo como todos lo hacemos”. ¿Ese “mientras” suena a amenaza velada? ¿Hubo en realidad crisis de pareja y ha quedado zanjada con este nuevo Ye redimido que ya no besa la esvástica? ¿Esa fue la condición de Censori? Solo ellos lo saben. De momento.

Kanye Wes y Bianca Censori en su show en los Grammy
Como también solo Elon Musk y Ashley St. Clair saben si el bebé que la escritora estadounidense de 26 años alumbró hace cinco meses es hijo del flamante ayudante del presidente Trump. El magnate ni ha confirmado ni ha desmentido el anuncio de la joven conservadora, autora de un libro infantil anti-woke sobre identidad de género. Eso sí, ha bromeado sobre el apodo ‘Gengis Kan moderno’ que está recibiendo estos días. “Por alguna razón, encuentro la historia de Gengis particularmente interesante”, escribió el lunes en su red social X junto a un emoji que guiña el ojo. Recordemos que las fuentes antiguas atribuyen al caudillo mongol la paternidad de centenares de hijos y existe la teoría de que podría ser el “padre” del 0.5% de la población mundial. Aún le queda terreno para recorrer en este sentido al fundador de SpaceX, quien dice que quiere conquistar Marte.
De momento, tiene cinco hijos con su primera esposa, Justine Wilson. Tres más con la estrella del pop Grimes, incluido el pequeño X, que la lio en la Casa Blanca hace unos días. Y gemelos con la ejecutiva de Neuralink, Shivon Zilis. Si al final se confirma su nueva paternidad, el bebé de St. Clair sería su hijo número 13. ¿Quizá Musk sea supersticioso?

Elon Musk con su hijo X en el despacho oval
Otra incertidumbre de esta semana: ¿Tom Cruise y Ana de Armas mantienen una relación sentimental? Los actores fueron pillados a la salida de una cena que compartieron en el Soho londinense en un día tan señalado como el de San Valentín. Y no era la primera vez que se les veía juntos. Unos días antes, fueron reconocidos en el lujoso hotel Chiltern Firehouse, que ocupa una antigua cuartel de bomberos. La protagonista de Blonde reaccionó a los rumores lanzando un “ya está bien” a la prensa que la interceptó mientras paseaba por Madrid con su última pareja conocida, Manuel Anido. “Estoy flipando con vosotros aquí, no voy a hablar con vosotros, no tengo nada que decir”, agregó.
Lo cierto es que De Armas y Cruise volverán a coincidir el fin de semana que viene en la gala de los Oscar, donde la hispano cubana entregará una estatuilla. Ambos intérpretes todavía no han protagonizado una película juntos, ¿quizá éste era este el motivo del encuentro? Otra duda todavía sin respuesta.

Tom Cruise y Ana de Armas
Ante tantas incógnitas, hay un hecho incuestionable. Shakira es la reina de Barranquilla. Tras acabar la semana ingresada en Lima por una cuadro abdominal que resultó ser una gastroenteritis tras filtrarse su parte médico, la cantante retomó su gira internacional que la llevó el jueves a su ciudad natal, donde no actuaba desde hacía casi veinte años.
“¡Barranquilla, esto es para ti!”, entonó emocionada. Y como jugaba en casa, no faltaron en las gradas su madre Nydia Ripoll y sus hijos Milan y Sasha, que canturrearon sus canciones. De alguna manera, también estuvieron presentes Gerard Piqué y Clara Chía, a quienes les recordó que ella sigue siendo la loba. Y aulló como nunca en un concierto muy carnavalero. “Si mi papá pudiera ver esto...”, se lamentó ante la única ausencia en su cita con un Barranquilla entregado.

Shakira en Barranquilla con su gira “Las Mujeres Ya No Lloran”
Los problemas de salud del padre de Shakira, convaleciente, no son los únicos de los que se han hablado esta semana. Por ejemplo, el rey Abdalá II de Jordania pasó otra vez por quirófano para operarse de una hernia mientras su mujer Rania presumía de nietas bebés en un vídeo en Instagram. Pero la gran sorpresa la dio Aitana, que lanzada a promocionar su serie documental Metamorfosis que estrenará Netflix el viernes que viene, confesaba que ha sufrido una depresión diagnosticada de la que todavía se está recuperando. “Soy consciente de que estos son problemas del primer mundo, pero los quiero contar para que la gente también vea que, hasta lo que resulta más idílico o cuando parece que lo tienes todo, pues, a veces, no eres feliz y no sabes ni por qué, porque no entiendes lo que te pasa”, explicaba en una entrevista a la compañera Mamen Polaino en La Vanguardia.

Aitana Ocaña en el photocall de 'Metamorfosis'
La que seguramente no sabe muy bien lo que le pasa es a Meghan Markle. Parece que a la duquesa de Sussex no le pueda salir nada bien. Primero tuvo que posponer el estreno de su programa de Netflix Con amor, Meghan (With Love, Meghan) debido a los incendios de Los Ángeles. Y ahora, ha anunciado el cambio de nombre de su marca American Riviera Orchard, con la que tenía problemas de registro. La empresa, que lanzó la primavera pasada y con la que todavía no ha puesto ningún producto a la venta, ha pasado a llamarse As ever (Como siempre).
El martes mostró el nuevo logo, una palmera donde revoletean dos colibríes a cada uno de sus lados. Coincidencias de la vida, o no, la imagen es muy parecida al escudo del pueblo mallorquín Porreres. Su alcaldesa estudia una posible demanda por plagio a la vez que invita a la duquesa a las fiestas del pueblo. Lo cortés no quita lo valiente. Pero por si no tenía suficiente con la imagen de su empresa, el nombre escogido también ha generado controversias. La royal americana ha recibido críticas por copiarlo de una conocida marca de ropa de Nueva York, llamada As ever, evidentemente. Definitivamente, cualquiera diría que está gafada, o mal asesorada.

Imagen de la web de asever.com en la que Meghan Markle y su hija Lilibeth corren por el jardín de su casa de Montecito.
Las que tampoco tienen mucha suerte son las princesas imperiales del Japón, quienes, a pesar de las recomendaciones de la ONU, no pueden acceder al trono del Crisantemo debido a su condición de mujer. Un reportaje de Enric Trias explica la última controversia sobre esta milenaria discriminación. El ejecutivo nipón ha reaccionado a un reciente informe del Comité para la Eliminación de la Discriminación contra la Mujer de ACNUDH que ponía sobre la mesa esta cuestión, recortando sus aportaciones voluntarias al Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos. Y, por si fuera poco, el ministro de exteriores zanjaba la cuestión asegurando que “la elegibilidad para ascender al trono no está incluida en los derechos humanos fundamentales, por lo que limitar la sucesión a los varones no es discriminatorio”.
La joven hija única del emperador, la princesa Aiko, solo puede contentarse con entretener a los embajadores extranjeros lanzando patos de caza en Tokio, como la vimos hace unos días y según marca la tan inquebrantable tradición. Su realidad es muy diferente a la de la princesa Leonor, que sigue su viaje de instrucción en Elcano. A toda vela. Su próxima parada, Montevideo.