El Parking Pizza (y Parking Pita) del paseo Sant Joan acogió el martes una gran fiesta en la que se celebraban los diez años desde que una pareja de emprendedores, Berta Bernat y Marcos Armenteras, abrieron su primera pizzería en Barcelona. El primer Parking Pizza fue todo un éxito no solo por la calidad de sus pizzas sino por la acertado interiorismo de aquel local de la calle Londres que sería el primero de una serie de aperturas hasta llegar a los 9 locales que suman hoy en día entre Barcelona y Madrid, a los que en 2026 tienen previsto añadir algunos más.
Parking Pizza ha sido precursor de un estilo de pizzerías que han ido abriendo siguiendo la estela del magnetismo y el buen gusto de sus creadores. Hace dos años Marcos Armenteros falleció repentinamente a causa de un infarto y el martes, en un Parking Pizza lleno a rebosar, se podía palpar el cariño y la admiración a Berta Bernat, quien acogió a sus invitados con un amplio repertorio de las elaboraciones que triunfan en sus establecimientos.
Hace dos años Marcos Armenteros falleció repentinamente a causa de un infarto y el martes, en un Parking Pizza lleno a rebosar, se podía palpar el cariño
Cuando abrieron, recuerda, llevaban muchos años trabajando para otros en la restauración y antes de decidirse por un tipo de negocio, solo tenían claro que debía ser algo distinto y que saliera del clásico restaurante. Viajaban mucho y disfrutaban probando pizzas.
Una de las pizzas de Parking Pizza
Y finalmente dieron el paso. La cocina abierta, el horno de leña como pieza central, el espacio diáfano y el aspecto industrial con la calidad de los puntos de luz con lámparas retro, los asientos de cartón que sirven de pequeños contenedores. Y el modelo se amplió con el Parking Pita o el Parking Sótano, de exitosas carnes.
