La nueva consellera de Educación, Cultura y Universidades, Carmen Ortí, se estrenó ayer en su primera comparecencia ante los medios explicando que las aulas valencianas registran una preocupante tendencia al alza en las incidencias totales de convivencia: han pasado de 4.543, en 2018, a 11.403, en 2023, lo que representa que casi se han triplicado en cinco años. Una situación que para la consellera es también fruto de “la aplicación de protocolos y de una mayor concienciación”. Las cifras, junto con los casos de ciberacoso y acoso que también se habían ido sucediendo, están detrás del llamado plan ConViure, el nuevo decreto de convivencia en el sistema educativo de la Comunidad Valenciana que ayer presentó Ortí en València y que el Consell ya tramitó el pasado día 12 de diciembre con carácter de urgencia.
Con él, Educación pretende garantizar entornos educativos seguros, inclusivos y respetuosos para que “el alumnado y el profesorado se sienta acogido y defendido”. El decreto, que entrará en vigor el próximo 7 de enero, a la vuelta de las vacaciones escolares de Navidad, refuerza la protección de las víctimas y la defensa del profesor, un aspecto en el que la consellera y su equipo pusieron ayer especial énfasis.
Protestas
Sindicatos y consellera se reunirán el 7 de enero
La consellera Ortí expuso ayer su talante dialogante para abordar con los sindicatos las protestas que llevaron a la huelga a una parte de la comunidad educativa y que amenazan con perpetuarse el próximo año. Ortí dijo que había solicitado “reunirse con todos los sindicatos” y se mostró “dispuesta a la negociación”. A mediodía, después de la mesa sectorial sobre FP, los sindicatos STEPV, CSIF, CCOO y UGT se concentraron en la puerta del despacho de la consellera para exigir la reunión “solicitada por escrito el mismo día en que tomó posesión”. Finalmente esa cita se cumplirá el 7 de enero, cuando le plantearán sus reivindicaciones, incrementos salariales para compensar la pérdida de poder adquisitivo, reducción de ratios, burocracia y sobrecarga de trabajo, reversión de los recortes de plantillas docentes, mejoras de las infraestructuras y sustitución de la ley de libertad educativa “que respete el valenciano”.
Al respecto, la directora general de Innovación e Inclusión Educativa, Xaro Escrig, señaló que “las agresiones habían aumentado de manera significativa”, mientras la consellera recordó que los profesores ya son “autoridades por ley” y explicó que “el daño, la agresión, la injuria o la ofensa al profesorado en el ejercicio de sus funciones se considerará una falta grave”.
En este caso se podrán abrir procedimientos conciliadores, una herramienta que se podrá acoger al trámite de urgencia en el expediente para reducir a la mitad los plazos establecidos.
El decreto incorpora un enfoque “inclusivo”, según explicaron, ya que la condición de víctima con necesidades específicas de apoyo educativo actuará como agravante en la gradación de la responsabilidad.
Escrig expuso también que el año pasado ya se activó un protocolo de acompañamiento al profesorado, de similar rango que la orden de uso de móviles en las aulas. Ahora el nuevo decreto ofrece un rango normativo superior a lo establecido en la resolución de abril de 2024, una medida “ampliamente demandada” por la comunidad educativa que buscaba minimizar su impacto en el aprendizaje y en situaciones de ciberacoso, además de mejorar el bienestar socioemocional del alumnado. Al respecto, Escrig explicó que desde 2019 se habían duplicado las notificaciones por uso inapropiado del móvil (145 a 270) y los casos de ciberacoso habían aumentado en casi el 50% en las aulas valencianas. Tras la regulación las cifras han bajado en un 60%, “lo que subraya la necesidad de medidas de prevención”, apostilló.
Educación estudia aplicar nuevas medidas en Primaria tras la regulación de dispositivos móviles
A partir de ahora, el uso de estos dispositivos se permite únicamente por “razones didácticas” contempladas en el proyecto educativo y las programaciones de aula, o por razones específicas de salud debidamente justificadas y autorizadas.
En este sentido, el secretario autonómico de Eduación, Daniel McEvoy, adelantó que se está trabajando en la modificación del decreto de Primaria “que introducirá novedades en este sentido, porque se establece un movimiento pendular (cuanto al uso de pantallas en el aula) y realmente la virtud está en su justa medida y es lo que vamos a incluir en el decreto de regulación”.


