Existe una gran controversia en torno a las aplicaciones de ligue. Mientras que algunos defienden que se trata de una forma eficaz de conocer gente y de establecer relaciones, adaptada a la era digital en la que vivimos, otros aseguran que se ha perdido la magia del cara a cara y que nos hemos vuelto esclavos de las pantallas.
La psiquiatra Marian Rojas Estapé, conocida por libros como Encuentra tu persona vitamina o Recupera tu mente, reconquista tu vida, abordó este tema en una de sus últimas publicaciones en Instagram.
''Las apps de citas están a la orden del día. Se han convertido en una forma habitual de conocer gente, establecer vínculos e incluso encontrar pareja. Y aunque en algunos casos funcionan y pueden dar lugar a relaciones bonitas y sanas, en otros pueden tener consecuencias emocionales muy negativas. Es algo muy personal, y depende mucho del momento vital y del estado emocional en el que se encuentre cada uno'', empezó diciendo la creadora de contenido.
En su opinión, el problema surge cuando se utilizan estas aplicaciones como si fueran ''dispensadores automáticos de afecto'', ya que pueden influir en nuestra manera de vincularnos y relacionarnos, en nuestra personalidad e incluso en nuestra autoestima.

Aplicaciones de ligue.
La doctora inició un debate en torno a dos preguntas principales: ''¿Qué implica ser elegido o descartado en segundos por una imagen? ¿A qué parte de nuestra autoestima estamos apelando cuando buscamos conexión afectiva a través de una pantalla?''.
Tal como expresó, las apps de ligue activan nuestros circuitos de recompensa a través de la dopamina, generando un subidón momentáneo basado en los matches y los me gusta recibidos: ''Cuando uno mide su valor personal por el éxito que obtiene en estas plataformas, a la larga pueden aparecer la ansiedad, la tristeza, frustración o un vacío emocional profundo''.
Establecer límites saludables
Antes de finalizar su reflexión, la escritora aconsejó a los millones de seguidores que acumula en la red social de color rosa utilizar este tipo de aplicaciones con conciencia, estableciendo límites saludables para evitar salir dañados. Además, recomendó prestar especial atención a fenómenos como el ghosting, el descarte rápido o los vínculos superficiales, ya que, en su opinión, pueden reabrir heridas emocionales del pasado o acentuar la baja autoestima.
A modo de conclusión, Estapé señaló que no se deberían usar estas apps para llenar vacíos ni anestesiar emociones, sino desde un lugar de autoconocimiento, seguridad interior y cuidado personal.