La nutricionista María de los Ángeles García, conocida popularmente como Boticaria García o Marián García, visitaba este lunes, 28 de julio, el plató de Zapeando, el programa de La Sexta presentado por Dani Mateo, para hablar sobre dos de los productos estrella del verano: el melón y la sandía. En primer lugar, la divulgadora científica desmontaba uno de los grandes mitos del melón: ¿existen realmente melones macho y melones hembra?
''Siento decir que lo melones son como un matrimonio largo, no tienen sexo. Todo vienen de una flor femenina, pero el fruto no tiene género. La forma y el sabor dependen de la variedad del riego que tenga o el sol'', afirmaba.

Los plátanos y la sandía también han sido seleccionados artificialmente para que no contengan semillas
Sobre el motivo por el que algunos melones tienen sabor a pepino, la experta en nutrición explicaba que es algo totalmente normal por un motivo muy concreto. ''Es normal que algún melón tenga ese regustillo a pepino y pueda repetir porque son primero, son de la misma familia, de las cucurbitáceas. Si os fijáis en las pepitas, se parecen mucho. Esto les fastidia mucho a los productores de los melones porque se ha demostrado que cuando abres un melón y te sale malo, del enfado ya no compras más'', aseguraba.
Uno de los grandes mitos de la sandía tiene que ver con esa gran mancha amarilla que muchos relacionan con su sabor. ''Significa que la sandía ha madurado al sol y esa mancha es la parte que ha estado apoyada en el suelo. Que la mancha sea más amarilla no es sinónimo de garantía'', aseguraba.

El melón por la noche es un postre saludable, no indigesto, como muchas personas creen.
Una de las claves para triunfar en el supermercado y elegir buenos productos es comprar de mayo a octubre. ''Se tienen que tomar en su época, entre finales de mayo y primero de septiembre la sandía o de octubre el melón. Ahí es cuando se supone que están mejor'', aclaraba la experta. También es crucial elegir aquellos que están en la cima del montón. ''Los ejemplares que están arriba del todo han tenido menos golpes que los de abajo'', recalcaba.
Según Boticaria García, también hay que fijarse en el color. ''Los melones verdes intensos no están en su punto todavía. En las sandías hay más matices. Si hay un melón o sandía con grietas hay que descartarlo porque por ahí se pueden oxidar y entran bichos'', explicaba. En cuanto a los famosos golpecitos, la divulgadora aseguraba que la sandía se puede golpear levemente y si está en su punto suena a hueco. ''El melón se aprieta por los extremos y si está en su punto, la base cederá un poco como con el aguacate'', desvelaba a la vez que recordaba la importancia del aroma a fruta madura.

Las sandía y el melón son algunas de las frutas más hidratantes del verano
Por último, la nutricionista explicaba cómo almacenar una sandía o un melón en casa. ''Hay muchos casos de diarrea por conservar mal los melones y las sandías porque no caben en las neveras. Mi consejo es que una vez que se ha abierto, se trocea de manera que pueda caber en un tupper o en varios. Y así la tienen ya partida en la nevera'', recomendaba.