Esta preparación tiene algunos trucos: primero, purgar las cañaíllas por lo menos por una hora; y segundo, al retirar la carne para condimentarla, extraer su primera capa circular, que es más dura. Lo demás es el calor de la cazuela y el gratinado del horno, con el mimo de una mantequilla con perejil y ajo que abraza y potencia los sabores.
Cañaíllas con mantequilla de perejil
Ingredientes
Para las cañaíllas:
500 gr. de cañaíllas
1 hoja de laurel
20 gr. de pan rallado
Para la mantequilla de perejil:
100 gr. de mantequilla
1 diente de ajo grande
Perejil fresco
Sal y pimienta blanca

Cañaíllas con mantequilla de perejil
Elaboración
1. Primero de todo, pon a purgar las cañaíllas en agua y sal un mínimo de 1 hora. Cambia el agua si es necesario. Escúrrelas y acláralas con agua fría.
2. Pon agua con sal (30 gr. por litro) junto con la hoja de laurel, a hervir. Una vez que llegue a ebullición, incorpora las cañaíllas y deja que cuezan 15’.
3. Mientras, haz la mantequilla de perejil. Mezcla la mantequilla pomada, junto con el ajo y el perejil muy picados. Añade sal y pimienta.
4. Retira la carne de las conchas (no te olvides de retirar la primera capa circular más dura) y resérvala. Introduce un poco de mantequilla en la cocha, la carne y más mantequilla.
5. Coloca las cañaíllas sobre una bandeja de horno. Espolvorea un poco de pan rallado y gratina en el horno unos 4’ aprox.