Tiene 45 años, pero tenis para rato. La estadounidense Venus Williams, ex número uno del mundo, aún no quiere retirarse del tenis y este miércoles ha confirmado su presencia en el torneo de Auckland en enero. Un acontecimiento que se celebra del 5 al 11 de ese mes, justo antes del Open de Australia.
Williams se sometió a una miomectomía —una cirugía para extirpar fibromas uterinos— en julio de 2024. Tras casi un año y medio de ausencia del circuito, regresó a las pistas en julio en el torneo de Washington. En su regreso, se enfrentó a su compatriota Peyton Stearns, de 24 años y número 35 del mundo, quien ni siquiera había nacido cuando Venus Williams levantó su primer trofeo de Wimbledon en el año 2000. Stearns ganó el partido en dos sets.
Luego disputó dos partidos más durante el verano, ambos con derrota, en Cincinnati y en el US Open, aunque logró arrebatarle un set a la número 13 del mundo, la checa Karolina Muchova, en Nueva York.
“Es una de las grandes jugadoras de la era moderna, y su desempeño en la pista habla por sí solo”, declaró el director del torneo de Auckland, Nicolas Lamperin, añadiendo que la tenista estadounidense se encontraba en “un estado de forma y condición física excepcionales”. “Venus ha tenido una profunda influencia en la evolución del tenis femenino y ha inspirado a la próxima generación con su inquebrantable pasión por este deporte”, agregó.
Venus Williams, quien ganó el Clásico de Auckland en 2015 al derrotar a Caroline Wozniacki en la final, ha conquistado cinco títulos individuales de Wimbledon, dos títulos del US Open y una medalla de oro olímpica en Sídney 2000.
Lamperin consideró un “privilegio” verla jugar nuevamente en Auckland. “Todos los aficionados al deporte deberían aprovechar esta oportunidad para ver en acción a una de las mejores jugadoras de todos los tiempos”, dijo.

