No todos los avisos del corazón llegan con dramatismo: a veces, se manifiestan en pequeños gestos cotidianos. Dormir con varias almohadas para poder respirar, detenerse en seco al subir unas escaleras o notar las piernas hinchadas pueden parecer cosas normales, pero el cardiólogo Aurelio Rojas alerta de que son signos que merecen atención. “Si notas una de estas tres señales, cuidado, porque tu corazón puede estar en problemas”, advierte en un vídeo compartido desde su cuenta de Instagram (@doctorrojass).
Una almohada no es suficiente
Dormir incorporado puede ser una señal temprana de insuficiencia cardíaca, y no solo una costumbre sin importancia
La primera señal, explica, es la ortopnea, una dificultad para respirar al estar tumbado que obliga a muchas personas a dormir casi sentadas o con un número excesivo de almohadas. “Lo que solemos hacer es sentarnos bruscamente en el filo de la cama para poder recobrar el aliento”, detalla Rojas. Esta incomodidad puede ser un síntoma de insuficiencia cardíaca en fases tempranas.
La segunda pista es más conocida: la angina de pecho, aunque a veces no se presenta como un dolor al uso. “Consiste en una presión muy fuerte en el centro del pecho que te obliga a pararte cuando estás haciendo algún esfuerzo físico como subir una cuesta o unas escaleras”, señala el especialista. La molestia suele remitir al descansar, pero en mujeres y personas mayores puede mostrarse como fatiga intensa o falta de aire más que como dolor agudo.
Por último, la retención de líquidos puede delatar un corazón que no está funcionando al 100 %. “En este caso vas a notar sobre todo que se te hinchan las piernas y que además cuando tocas con el dedo se queda totalmente marcada la forma de ese dedo. Esto se llama edemas con fóvea”, añade Rojas.
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El especialista insiste en que estos síntomas, tomados de forma aislada, pueden confundirse con cansancio, mala postura o calor. Pero cuando se repiten o aparecen de forma sostenida, “no hay que ignorarlos ni posponer la visita médica”.
“Si alguna vez notas algo así, no pierdas el tiempo y hazle caso a tu corazón”, concluye el cardiólogo.