Ya ha arrancado la cuenta atrás para Navidad y, aunque para muchos esto resulte algo emocionante, para otros supone una pesadilla. Porque sí, existen diversas formas de vivir la Navidad y no todo el mundo lo hace como se muestra en las películas, y no siempre es tan ilusionante como “se supone que debería ser”.
En esta época aparecen las comidas abundantes o los planes sociales con amigos y familia que acaparan cada uno de nuestros días durante las vacaciones. Pero este mes de diciembre, para algunos, es todo un desafío, ya que se juntan diferentes sentimientos: una mezcla de disfrute y temor al descontrol alimenticio, algo que suele generar malestar y culpa. Pero, ¿qué pasaría si pudieras disfrutar plenamente de las comidas y celebraciones navideñas sin caer en excesos ni remordimientos?
May Morón, experta en nutrición emocional, propone que vivamos la Navidad de otra manera. Su solución es comenzar a vivir la Navidad de forma consciente. Se trata de un enfoque que permite disfrutar de cada bocado y cada momento sin preocuparse por las dietas o el aumento de peso. En lugar de enfocarse en la restricción, Morón enseña a reconectar con el cuerpo y la comida para vivir una Navidad más equilibrada.
“El problema no es la comida en sí, sino cómo nos relacionamos con ella”, explica Morón. Muchos oscilan entre el placer y la culpa, lo que genera ansiedad y lleva a excesos. En lugar de seguir este ciclo, la alimentación consciente propone prestar atención a las señales del cuerpo como el hambre y la saciedad y disfrutar de la comida sin automatismos ni impulsos.
Claves prácticas para una Navidad consciente
En primer lugar, la experta recomienda conectar con el momento. Antes de comer, propone respirar de forma profunda y ser conscientes de lo que nos rodea. Por ejemplo, insiste en poner atención a las conversaciones, los olores de la sala en la que estemos e incluso a los colores que predominan. Comer tiene que convertirse en una experiencia multisensorial.
Navidad
Por otro lado, debemos comer despacio y prestando atención. Hay que centrarse en saborear cada bocado. Además, comer lentamente no solo mejora nuestra experiencia, sino que también nos permite reconocer cuándo estamos saciados.
Otro factor que debemos tener en cuenta es el hecho de poder disfrutar sin culpa. “No te prives de tus platos favoritos”, cuenta la experta. Debemos intentar centrarnos en disfrutar sin remordimientos y eliminar la mentalidad del “todo o nada”, de modo que equilibremos nuestra relación con la comida.
Escuchar a tu cuerpo es otro de los factores muy importantes. Aprender a reconocer las señales de hambre y saciedad será clave para ayudarnos en nuestro proceso. “No tienes que acabar todo el plato o comer hasta sentirte llena”, cuenta Morón.
Otro de los puntos en los que insiste la experta es saborear la experiencia completa: “Las comidas navideñas están llenas de sabores únicos. Comer con atención plena te permitirá disfrutar más y evitar los excesos”, añade. Tomar decisiones conscientes será muy beneficioso. Por ejemplo, no es necesario comer o beber de todo en cada comida. También se puede disfrutar de platos sanos y ricos durante las fiestas. Por último, Morón recomienda movernos todos los días: mantener el cuerpo activo nos ayudará a sentirnos bien durante todo diciembre.



