El PP se ha querido pronunciar sobre los problemas que rodean al PSOE de Pedro Sánchez este miércoles. La detención de Leire Díez y el expresidente de la SEPI Vicente Fernández, se ha juntado con la dimisión del presidente de la Diputación de Lugo, José Tomé, acusado de acoso sexual. “El partido de Sánchez y del feminista Salazar hoy ha hecho triplete”, ha ironizado Miguel Tellado, secretario general del PP.
“Las cárceles de España van a empezar a quedarse pequeñas. No hay hueco para tanto delincuente de la mafia sanchista”, ha añadido en un mensaje difundido a través de las redes sociales, poco después de que se conociera que Díez y Fernández han sido detenidos en una operación de la Guardia Civil en el marco de una causa dirigida por la Audiencia Nacional.
Diez es conocida por los supuestos intentos de tejer una trama para desacreditar a la Guardia Civil, mientras que Fernández fue una figura de la máxima confianza de María Jesús Montero. Además, Fernández ha trabajado supuestamente para Servinabar entre 2021 y 2023, la empresa vinculada a Santos Cerdán.
El propio Cerdán está citado el miércoles que viene en el Senado para dar explicaciones tras su paso por la cárcel por su supuesta implicación en una trama de cobro de comisiones ilegales. Según fuentes del PP, su mujer, Francisca Muñoz, alias 'La Paqui', ha trasladado este miércoles un parte médico al Senado para justificar su ausencia el lunes, cuando estaba citada en la Comisión de Investigación.
Respecto a la dimisión del presidente de la Diputación de Lugo, los populares creen que el PSOE ha perdido toda “credibilidad” para hablar de feminismo. Fuentes del partido aseguran que “van a pasar años” para que los socialistas puedan “recuperar credibilidad porque han fallado por la corrupción y el feminismo”.
En este sentido, fuentes del partido señalan que van a “incidir con toda intensidad” en los temas vinculados a la mujer ya que el PSOE acumula varios escándalos que pueden hacerles perder mucho voto femenino. Al caso de Tomé, se une el reciente caso de Paco Salazar, exestrecho colaborador de Sánchez y ahora acusado también de acoso sexual.


