Pablo Teipro, divulgador del vino: “Cuando adquirimos vino en el súper, generalmente debemos comprar uno de consumo rápido; nada de buscar añadas antiguas, para que envejezca bien necesita unas condiciones óptimas que en el súper no se dan”

Trucos de vinos

No hace falta ser sumiller o enólogo para disfrutar de un buen vino en casa, basta con dejarse aconsejar por los que saben: Pablo Teipro, experto en vino, nos da las claves para elegir, degustar y conservar el vino sin cometer errores

El divulgador tiene miles de seguidores.

El divulgador tiene miles de seguidores. 

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Nos encanta quedar con los amigos y salir a cenar a un restaurante. Sin embargo, cada vez nos gusta más juntarnos y compartir una deliciosa cena casera en nuestro hogar, completando el menú, por supuesto, con un buen vino. Y ahí, es donde algunos entran en pánico. ¿Qué vino escoger? ¿Cómo servirlo? ¿Qué temperatura es la ideal? ¿Qué hacemos con él si no nos lo acabamos?

Responder a todas estas cuestiones puede resultar abrumador cuando no pasamos de ser simples aficionados al vino. Sin embargo, cada vez hay más voces expertas que defienden la idea de que para disfrutar del vino no es necesario ser un gran sumiller, del mismo modo que para apreciar una buena comida, nadie te pedirá que seas Ferran Adrià o Martín Berasategui.

Ahora bien, aunque se puede escoger un vino guiados por la intuición y tomarlo de la manera más correcta posible, lo cierto es que nos estaríamos perdiendo toda una experiencia sensorial, e incluso, emocional, que podíamos vivir simplemente teniendo en cuenta algunas recomendaciones básicas.

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Qué y cómo beber vino en casa

Más que nunca, las redes están a rebosar de consejos relacionados con el vino y la cata. Algunos de los más interesantes los hemos podido escuchar por boca de Pablo Teipro, divulgador del vino que cuenta con una legión de seguidores, casi 250.000 en Instagram. Sus vídeos arrasan entre los amantes del vino, y es que sus tips responden a muchas de las dudas que la mayoría de la gente tiene en sus casas.

Vaya por delante que, para Pablo, por encima de los consejos y recomendaciones, lo que más le gusta es que la gente beba vino, y, sobre todo, que se divierta y disfrute de la experiencia. Ahora bien, partiendo de esta idea, también nos muestra algunos de los aspectos que conviene tener en cuenta a la hora de disfrutar en casa de una copa de vino, ya sea sola o para acompañar una comida o una cena.

Aunque el precio no lo es todo, hay un mínimo

A pesar de que no existe una regla infalible acerca de la relación del precio y la calidad del vino, lo que sí se puede establecer es una cantidad orientativa a la hora de comprar una botella de vino. Así, ese mínimo podría estar en los 6 euros. Este es el corte que sugiere Pablo Teipro. “Si pensamos en lo que cuesta el vidrio, el corcho, la etiqueta, la logística y los costes comerciales, por menos de 6 euros es difícil encontrar un vino que ofrezca una calidad mínima”.

Fíjate bien en la etiqueta

Además del nombre del vino, la variedad de uva, la bodega, o la graduación, hay un dato en la etiqueta que es especialmente importante cuando vamos a comprar una botella en el supermercado. “Cuando adquirimos vino en el súper, generalmente debemos comprar uno de consumo rápido, con lo cual, lo primero que hay que mirar en una etiqueta es la añada. Nada de buscar añadas antiguas, para que un vino envejezca bien necesita unas condiciones óptimas que en el súper no se dan”.

Por menos de 6 euros es difícil encontrar un vino que ofrezca una calidad mínima

Pablo TeiproDivulgador del vino

Si no tienes vinoteca… guárdalo en la nevera

Si todavía no te has hecho con una vinoteca, lo cual sería lo ideal para guardar el vino cuando llegas a casa, Pablo propone un plan B que todos podemos poner en marcha: guardarlo la nevera. Esta opción es correcta siempre que “lo vayamos a tomar esa noche, o dentro de unos días”, apunta.

Por otro lado, nos recuerda que los dos mayores enemigos del vino a la hora de conservarlo son la temperatura y la luz. Así que, si no quieres guardarlo en la nevera “hazlo en un armario o alguna zona oscura y lo más fresca que encuentres en casa”, aconseja.

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Además, el asunto de la temperatura no es fácil. Pablo recomienda, en general, tomarlo entre 13 y 16 grados, algo que no es sencillo de calcular, y recuerda que “si lo has guardado en la nevera, es aconsejable sacarlo unos 15 minutos antes para que se atempere”.

El sacacorchos y la copa también importan

Al hablar de sacacorchos, Teipro distingue entre los vinos jóvenes y viejos. Para los primeros, “siempre recomiendo un sacacorchos de dos tiempos, hay opciones muy asequibles por menos de 10 euros. Para los vinos viejos debemos usar un sacacorchos de láminas para evitar que se rompa el corcho: en este caso, también hay opciones por debajo de los 10 euros”. Además, “para asegurarnos de que el corcho no se rompe, para los más geeks aconsejo el sacacorchos Durand, pero aquí sí estamos hablando de un gadget de más de 100 euros”.

Y aunque la mayoría de la gente, incluido Teipro, elegiría una copa para beber vino. Lo cierto es que “ya hay algunas marcas que están comercializando vasos pensados para beber vino”, apunta el experto. La razón principal para seguir con la tradición de beber el vino en una copa es que se calienta más despacio. Sin embargo, “si no tienes copa, no importa, bebe en un vaso”.

Teipro da algunos consejos para disfrutar del vino en casa.

Teipro da algunos consejos para disfrutar del vino en casa. 

Yuri Arcurs

Llena la copa solo lo justo

¿Y qué es lo justo? Bien, pues según el experto, “la medida estándar es 12,5 cl, lo que significa seis copas por botella”. Algo difícil de calcular, así que Teipro nos da una pista: al echar el vino en la copa, lo que hay que pensar es que, al girarla para airear los aromas del vino antes de beberlo, este no se derrame. Así que, la idea es echar una cantidad suficiente, pero no tanta como para que se corra el riesgo de que salpique.

Puedes usar decantador, pero solo si quieres

“El decantador se suele utilizar para que los vinos viejos respiren, aunque pueden hacerlo perfectamente en la copa. En el caso de los vinos jóvenes, sirve para airearlos. Pero, conseguiremos el mismo efecto si dejamos el vino en la copa durante unos minutos. Así que, diría que el decantador es un elemento estético que puede ser útil, pero no es una herramienta absolutamente necesaria que haya que tener en casa”, apunta Teipro.

Si sobra vino, lo mejor es echarlo en un tarro de cristal, y cuanto más llenemos el recipiente, mejor

Pablo TeiproDivulgador del vino

Si a ti te gusta así, échale un cubito de hielo

Si el vino está caliente, “prefiero enfriarlo poniendo la botella en una cubitera, metiéndolo en la nevera o en el congelador. Ahora bien, si te gusta el vino blanco con un cubito de hielo, ¡adelante! Es cierto que el hielo puede diluir el sabor del vino, pero si a ti te gusta así, por supuesto que se puede echar un cubito sin problema”.

Guarda lo que no has bebido en un tarro de cristal

Aunque no es lo habitual, a veces, puede que sobre un poco de vino. Cuando esto ocurre, olvídate de colocar de nuevo el corcho en la botella. “Lo mejor es echarlo en un tarro de cristal, de esos que tenemos todos en casa. Cuanto más llenemos el recipiente de vino, mejor, porque así queda menos oxígeno libre en su interior. De esta manera, el vino aguanta mucho más tiempo”, explica.

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No le cojas cariño… Si te sobra, bébetelo pronto

Si has abierto la botella el lunes, no esperes al fin de semana para terminarla. “A partir del primer día, el vino empieza a bajar su calidad; aunque el límite no es el mismo para todos, ya que depende de cada tipo de vino, en general, el máximo no debería exceder de 3 o 4 días, pero si es un vino dulce o un vino fortificado, tipo Jerez, dura bastante más”. En cualquier caso, el máximo es de cuatro días. “De hecho, a partir de ese momento, aunque el vino esté bueno, probablemente notarás que ya no es el mismo vino que cuando lo abriste”, advierte Teipro. 

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