¿Buscas renovar tu smart TV por una de gran calidad y tamaño, pero que no te cueste un ojo de la cara? Marcas como Samsung, LG o TCL son famosas por tener catálogos enormes de televisiones y algunas a muy buenos precios. TCL es un fabricante algo más reciente que está destacando por sus smart TVs de gran calidad de imagen a precios muy competitivos.
Una de las televisiones que me gusta recomendar, sobre todo cuando baja de precio, es la TCL T8B de 65 pulgadas. Hoy puedes conseguirla por 699 euros en Amazon, un precio fabuloso teniendo en cuenta que su valor de salida fue de 899,99 euros. Si tienes el espacio suficiente para colocarla en casa, no lo dudes, es una compra fantástica.
Calidad de imagen soberbia, y sistema operativo sobresaliente

Este modelo de TCL es uno de los mejores de su catálogo
Si tienes espacio suficiente en tu salón o sala dedicada de entretenimiento, esta smart TV de TCL es una gran compra, sobre todo si quieres ahorrarte un buen dinero. Monta un panel LCD con tecnología VA y 60 Hz de refresco. Su resolución nativa es 4K y puede conseguir alcanzar los 144 Hz a través de los puertos HDMI.
Esta pantalla admite formatos tan punteros como Dolby Vision, HDR10 y HLG. Con esto, y Android TV con la capa de personalización Google TV podrás aprovechar tu suscripción a alguno (o varios) de los servicios de contenido bajo demanda como Prime Video, Netflix o Apple TV+, entre otros.

Desde ella tendrás acceso a toda clase de apps de streaming de contenido bajo demanda
Incluye dos altavoces de 9,5 W RMS cada uno con los que tendrás un sonido limpio y claro, así como contundente. Desde ellos puedes escuchar toda clase de contenidos Dolby Digital Plus, y obtener una calidad impresionante si usas un equipo de sonido externo compatible con Dolby Atmos.
A nivel de puertos físicos, dispone de 3 HDMI (dos de ellos 2.0), salida óptica de sonido digital, puerto de auriculares Jack de 3,5 mm, entrada de red Ethernet RJ45 y USB-A 3.0. También contamos con WiFi 5 y Bluetooth 5.0, para periféricos inalámbricos como auriculares.
Es una tele de 65 pulgadas, pero su peso es de tan solo 14 kg sin las patas. Podrás colgarla de la pared con un soporte VESA de 200 x 200 mm. Esta smart TV tiene un grosor máximo de 8 cm y unos marcos bastante delgados, para que no te pierdas nada.
La posibilidad de llegar a los 144 Hz de refresco la hace ser una gran televisión barata para consolas de última generación como PlayStation 5 o Xbox Series X, así como muy buena para jugar con ordenadores de sobremesa cargados de buenos componentes gráficos.