Hemos dado la bienvenida al 2025 con un pico de casos de gripe que hace que la tos se haya convertido en la banda sonora más escuchada por las calles, establecimientos, transporte público… A la molesta tos hay que sumar síntomas como la congestión nasal y el dolor de garganta, afecciones que además suelen empeorar por la noche, dificultando nuestro sueño. Y no son solo exclusivos de la gripe, pues también los sufrimos con catarros, resfriados u otras enfermedades que afectan a las vías respiratorias.
A fin de curarnos y decir adiós a la gripe o el catarro, lo más importante es seguir las recomendaciones del personal médico y farmacéutico, pero también hay otros hábitos que podemos llevar a cabo con los que reducir el malestar. Entre ellos, cabe subrayar la importancia de beber suficiente agua y procurar descansar tanto como sea posible.
Y, además, existen algunos remedios caseros a los que podemos recurrir con el propósito de aliviar la tos y el dolor de garganta, como una infusión casera. Dentro del amplio espectro de infusiones, hay una que sobresale por la combinación de dos ingredientes muy eficaces para decir adiós a la tos y al dolor de garganta: la miel y la menta.

La miel tiene propiedades antioxidantes, antibacterianas y antiinflamatorias.
Los beneficios de la infusión de menta con miel para combatir la tos y la irritación de garganta
La miel tiene a sus espaldas un largo historial de uso con fines medicinales y no es de extrañar, pues contiene flavonoides y otros compuestos fenólicos que le confieren efectos antioxidantes, antibacterianos, antiinflamatorios y antifúngicos. Incluso se le atribuyen propiedades antimicrobianas.
A todo ello hay que añadir que proporciona energía gracias a su alto contenido en carbohidratos. Además, su densa textura ayuda a suavizar la irritación de la garganta asociada a la tos y crea una barrera para que esta no se reseque.

La menta despeja las vías respiratorias aliviando la tos y la congestión.
Por su parte, la menta cuenta con compuestos como el mentol, omega 3, vitaminas A y C, minerales como el hierro, el potasio, el magnesio, el calcio, el cobre y el ácido fólico. Este ingrediente tiene acción antiséptica, descongestionante, analgésica y antibacteriana. En concreto, el mentol contribuye a despejar las vías respiratorias gracias a su efecto expectorante, con lo que aliviarás notablemente la congestión y la tos.
Cómo hacer infusión casera de miel y menta
Para elaborar en casa la infusión de miel y menta, lo primero será lavar bien entre 10 y 15 hojas de menta bajo el chorro de agua para eliminar impurezas. Después, pon a hervir unos 300 mililitros de agua o bien una taza de agua.

Una infusión de menta y miel podrá aliviar el dolor de garganta asociado a la tos.
Cuando el agua llegue al punto de ebullición, incorpora las hojas de menta y déjalas hervir unos 10 minutos. Cuando falten un par de minutos, añade una o dos cucharadas de miel, en función de la consistencia y el dulzor que desees que tenga tu infusión. Finalmente, cuela la infusión y déjala reposar hasta que no queme.