En los últimos años, cada vez más tutores de perros y gatos se han interesado por ofrecer a sus animales una alimentación más natural, elaborada con ingredientes frescos y menos procesados. Este cambio de tendencia responde a la creciente preocupación por prevenir enfermedades, mejorar la digestión y potenciar el bienestar físico y emocional de las mascotas, y es que, según los expertos, la calidad y el tipo de dieta repercuten directamente en la microbiota intestinal, el sistema inmunitario e incluso el comportamiento de los animales.
“Un alimento 100% natural suele ser mucho más fácil de digerir para perros y gatos en comparación con uno ultraprocesado, debido a la calidad y simplicidad de sus ingredientes”, explica Paula Calvo, veterinaria especializada en alimentación natural y nutrición funcional. Para ello existen guías basadas en estudios científicos que orientan a los profesionales, como las que elabora la FEDIAF, y que buscan homogeneizar los valores nutricionales que necesitan nuestras mascotas. Porque, como dice Calvo, una buena nutrición no solo cubre necesidades básicas, sino que también es una herramienta clave para enriquecer la vida diaria de nuestros compañeros peludos y prolongar su longevidad.
¿Qué significa exactamente que un alimento esté “formulado según la FEDIAF”?
Significa que el alimento ha sido formulado siguiendo las directrices nutricionales de la Federación Europea de la Industria de Alimentos para Animales de Compañía (FEDIAF). Estas guías, elaboradas y revisadas periódicamente a partir de estudios científicos sobre los requerimientos nutricionales y la biodisponibilidad de nutrientes en perros y gatos, establecen valores mínimos y máximos para cada nutriente. De este modo, se busca asegurar que el alimento aporte las cantidades suficientes para evitar deficiencias, pero sin llegar a niveles que puedan resultar perjudiciales por exceso, ofreciendo así un margen de seguridad nutricional.
¿En qué se traduce eso para el bienestar real de la mascota?
Una formulación conforme a FEDIAF implica que, siempre que el producto sea completo y se utilice como dieta exclusiva, debería cubrir todas las necesidades nutricionales del animal a largo plazo, contribuyendo a mantener su salud y prevenir problemas derivados de carencias o excesos de nutrientes. No obstante, que un alimento haya sido formulado según FEDIAF no implica que sea una opción beneficiosa para cualquier perro o gato, ya que estas guías no contemplan patologías específicas. Es por ello que los casos de patologías deberían estar supervisados por un veterinario especializado para valorarlo de forma individualizada.
La microbiota intestinal está implicada no solo en la digestión, sino también en el sistema inmune, la producción de vitaminas y la protección frente a bacterias patógenas
Muchos perros comen lo mismo cada día durante años. ¿Esto podría afectar a su salud digestiva?
Desde el punto de vista nutricional, si el producto está bien formulado, esta práctica puede prevenir trastornos asociados a cambios bruscos de alimentación. Sin embargo, la ingesta continuada de los mismos ingredientes podría, con el tiempo, reducir la diversidad de la microbiota intestinal. Cuando un perro inicia una nueva dieta, esta microbiota comienza a adaptarse a la nueva composición de nutrientes, fibras y otros compuestos presentes en el alimento. Y la microbiota intestinal está implicada no solo en la digestión, sino también en el sistema inmune, la producción de vitaminas y la protección frente a bacterias patógenas, entre otras funciones.
¿Y también puede notarse en la salud cognitiva o emocional?
Una dieta sin variaciones puede disminuir la estimulación sensorial y reducir las oportunidades de enriquecimiento. En ese sentido, introducir cambios de textura, aroma o sabor, así como emplear otras estrategias como juguetes interactivos o juegos de búsqueda y olfato, puede favorecer la estimulación mental y mantener al perro más activo, tanto a nivel físico como a nivel cognitivo. No obstante, es altamente recomendable contar con la orientación de un profesional del comportamiento para evaluar los beneficios y posibles inconvenientes en cada caso en particular, ya que, en algunos individuos, el uso de estos recursos podría generar frustración o una mala gestión de la misma. Al final, somos los tutores quienes decidimos absolutamente todo sobre ellos —cuándo pasean, cuánto tiempo, en qué entornos, a qué hora comen, cuándo se quedan solos, etc.—, y si podemos aportarles algo de disfrute con la mayor frecuencia posible, esto va a repercutir notablemente en su bienestar.
¿Qué ingredientes habituales en el pienso seco pueden provocar inflamación crónica en perros y gatos?
En perros y gatos, la inflamación crónica asociada a la dieta suele deberse a una combinación de factores, como el tipo y calidad de los ingredientes, el grado de procesado y la presencia de determinados aditivos. Existen componentes que, en animales predispuestos o con sensibilidad digestiva o inmunitaria, pueden favorecer procesos inflamatorios. Por ejemplo, destacan los cereales y legumbres con antinutrientes, ya que algunos cereales como trigo o maíz y algunas legumbres contienen lectinas y fitatos que, en algunos animales, pueden inflamar el epitelio intestinal o interferir con la absorción de minerales, especialmente si constituyen la base de la fórmula. La oxidación de las grasas durante el procesado o el almacenamiento también generan compuestos proinflamatorios, así como aditivos y conservantes sintéticos: sustancias como BHA, BHT o etoxiquina han sido cuestionadas por su posible efecto proinflamatorio y por inducir estrés oxidativo. Y ciertos colorantes y potenciadores de sabor pueden afectar a animales sensibles.
¿Cómo influyen las materias primas y el proceso de elaboración en la aparición de posibles inflamaciones?
El riesgo aumenta en casos de predisposición genética, sensibilidades individuales o exposición continua. Y la calidad de las materias primas y un procesado menor pueden marcar la diferencia entre un ingrediente inocuo y uno potencialmente proinflamatorio. Además, hay moléculas perjudiciales que se forman durante el proceso de fabricación del alimento; por el sometimiento de los carbohidratos a altas temperaturas, se produce una reacción química, llamada Reacción de Maillard, que da lugar a una sustancia denominada acrilamida. En 2015, la EFSA (autoridad europea de seguridad alimentaria) publicó su primera evaluación integral del riesgo asociado a la acrilamida presente en los alimentos, y los expertos concluyeron que puede suponer un aumento del riesgo de padecer cáncer para los consumidores de todos los grupos de edad. Aunque no hay estudios específicos sobre los efectos de la acrilamida en perros en alimentos secos, se recomienda minimizar la exposición a esta sustancia para proteger la salud de las mascotas, ya que, tanto en animales de experimentación como en humanos se ha considerado un potencial genotóxico y carcinogénico.
En perros y gatos, la inflamación crónica asociada a la dieta suele deberse a una combinación de factores, como el tipo y calidad de los ingredientes, el grado de procesado y la presencia de determinados aditivos

Los alimentos naturales mejoran la digestibilidad, según estudios.
¿Por qué un alimento 100% natural puede ser mucho más fácil de digerir que uno ultraprocesado?
En un estudio, los alimentos de “calidad humana” presentaron una mayor digestibilidad y redujeron la cantidad de heces, siendo de 2 a 2,9 veces menos que con el pienso seco. Un alimento 100% natural suele ser mucho más fácil de digerir para perros y gatos en comparación con uno ultraprocesado, debido a la calidad y simplicidad de sus ingredientes. Los alimentos naturales están compuestos por carnes, órganos, vegetales y grasas sin modificaciones químicas, lo que permite que el sistema digestivo del animal reconozca y procese los nutrientes de forma más eficiente. En cambio, los alimentos ultraprocesados en muchas ocasiones contienen subproductos que requieren mayor esfuerzo digestivo y muchas veces no se absorben completamente.
¿Hay cambios en las heces de la mascota?
Totalmente. Un alimento más natural o mínimamente procesado suele ser más digestible, por lo que las heces son más pequeñas, firmes y menos olorosas. Esto se debe a una mayor absorción de nutrientes y una menor carga fermentable para el intestino.
Los gatos, carnívoros estrictos, pueden tener déficits graves si no reciben ciertos aminoácidos esenciales. ¿Están presentes en todos los alimentos comerciales?
Efectivamente, los animales pueden padecer problemas graves de salud si no reciben los aminoácidos esenciales para su especie, ya que son aminoácidos que su organismo no puede sintetizar por sí mismo, por tanto, deben ingerirlo a través de la dieta. Con Food For Joe, todos los aminoácidos esenciales están cubiertos.
¿Qué impacto tiene el método de cocción sobre el valor nutricional de la comida para animales?
Puede tener tanto efectos beneficiosos como perjudiciales. Por ejemplo, algunos métodos de cocción pueden ayudar a aumentar la biodisponibilidad de algunos micronutrientes, así como a mejorar la digestibilidad. Otros, sin embargo, pueden causar la pérdida de micronutrientes y formación de compuestos con efectos negativos para la salud.
La alimentación natural puede ser una herramienta muy eficaz para combatir la obesidad, por la mejor calidad de sus ingredientes, menor densidad calórica y por producir mayor saciedad
Muchos tutores confunden a un perro con sobrepeso con un perro fuerte y robusto. ¿Cuándo debemos empezar a preocuparnos?
Normalmente, lo que utilizamos para evaluar la condición corporal es una escala llamada índice de condición corporal (ICC), que va desde el 1 hasta el 9 generalmente (1 es el extremo del infrapeso y 9 es el extremo del sobrepeso). El ICC estaría entre un 4 y un 5. A nivel visual, se aprecia mejor en animales de pelo corto que de pelo largo. En una condición corporal de 5, lo que observaríamos desde una perspectiva superior es la cintura del perro y de perfil no veríamos las costillas, pero sí se podrían palpar al ejercer una leve presión. Si tienen dudas, lo mejor es consultar con su veterinario para una evaluación profesional.
¿Cómo afecta el exceso de peso a su longevidad? ¿La comida natural es mejor para combatir la obesidad?
El exceso de peso se relaciona con otros problemas de salud, como cardiovasculares, respiratorios, articulares y metabólicos, entre otros. En un estudio retrospectivo con más de 50.000 perros de 12 razas populares, se observó una reducción significativa en la vida media de perros con sobrepeso en comparación con aquellos que estaban en su peso ideal. La alimentación natural puede ser una herramienta muy eficaz para combatir la obesidad, por la mejor calidad de sus ingredientes, menor densidad calórica y por producir mayor saciedad. Pero el control de las calorías y la distribución de macronutrientes, así como el estilo de vida del paciente, también juegan un papel fundamental.
¿Una alimentación natural puede ayudar a reducir el mal aliento o los gases?
Sí, un exceso de gases puede estar relacionado con procesos digestivos inadecuados, exceso de fermentación a nivel intestinal y/o intolerancias alimentarias. Como comentaba anteriormente, la alimentación natural favorece la salud intestinal, promoviendo la diversidad y el equilibrio de la microbiota, reduciendo también el exceso de fermentación, siempre y cuando no existan otros problemas asociados. El mal aliento puede producirse por diferentes causas, como una mala salud bucodental o problemas digestivos. Un estudio reveló que las dietas ultraprocesadas y ricas en carbohidratos solubles (similares a la comida seca comercial) se asociaron con una mayor formación de sarro en perros.
¿Y la caída del pelo?
La salud de la piel y el pelaje de un animal depende en gran medida de su alimentación. Una dieta sin excesos ni carencias de nutrientes, permite que el organismo funcione correctamente, favoreciendo una piel saludable que actúa como barrera protectora, y un pelaje brillante, fuerte y con menor caída. Es importante aclarar que no todos los problemas de piel y pelo tienen origen nutricional; pueden estar relacionados con factores genéticos, inmunitarios, parasitarios o enfermedades sistémicas. Sin embargo, una buena alimentación es una base fundamental para mantener la salud dermatológica en óptimas condiciones.