El 21 de agosto, Robert Lewandowski (Varsovia, 1988) cumplirá 37 años. Pero nadie diría que los tiene. Cerró la temporada pasada con su mejor registro goleador desde su llegada al Barça en 2022: 42 goles en 52 partidos. De esos 42, 27 fueron en LaLiga, lo que lo convirtió en el segundo máximo artillero por detrás de Mbappé. Y porque se lesionó en el tramo final.
“Hablan mucho de mi edad, de que estoy envejeciendo. Pero yo no tengo problema con eso”, confiesa el polaco a Martin Ainstein, periodista de ESPN, en una entrevista concedida en la ciudad deportiva Joan Gamper. “Lo cierto es que me enorgullece mi edad. La veteranía es importante para ayudar a mis compañeros, sobre todo porque tenemos muchos jugadores jóvenes en el vestuario. Y, además, me siento muy bien. En la pretemporada, cuando corremos, mis compañeros todavía intentan alcanzarme. Eso significa mucho para mí”, recalca.
“Lamine Yamal ha generado una necesidad en Madrid”, cuenta el delantero en una entrevista a ESPN
Si hay un adjetivo que define a Lewandowski, ese es competitivo. Flick lo sabe y, en un Barça tan joven, confía plenamente en su liderazgo, hasta el punto de convertirlo en una de sus extensiones dentro del campo. Detrás tiene a un trabajador Ferran Torres que esta temporada asume el reto de ser una clara alternativa al polaco.
Sucederá, por ejemplo, en Mallorca. Lewandowski arrastra molestias musculares en el bíceps femoral del muslo izquierdo y no estará en el debut liguero. Se le espera en Vallecas, en la tercera jornada ante el Rayo Vallecano el próximo 31 de agosto. O quizás antes, porque es experto en recortar plazos. Mientras tanto, sigue entrenándose e insiste en que este Barça, con o sin él, tiene grandes expectativas: “Podemos y queremos jugar mejor”, afirma con una convicción notable, casi sorprendente si se tiene en cuenta que lo ha ganado todo.

Robert Lewandowski y Lamine Yamal junto a sus compañeros, durante la presentación del equipo en el Gamper
Pero en su interior sabe que este equipo tiene una espinita clavada. En el corazón de los campeones de la Liga, la Copa del Rey y la Supercopa de España, todavía resuena la derrota en la semifinal de la Champions en Milán. Lewandowski poco pudo aportar en aquel tramo final de la temporada debido a una lesión muscular en la misma pierna. Aunque para la vuelta en San Siro se había recuperado, no estaba al 100% físicamente y su participación fue testimonial. “Me lesioné en el peor momento, justo cuando me sentía muy bien en el campo”, cuenta a Ainstein, con la frustración de un competidor que siempre quiere dar lo mejor de sí.
Me lesioné en el peor momento, justo cuando me sentía muy bien en el campo”
“Pero sabemos lo que pasó y hemos mejorado. Creo que este equipo será aún más fuerte, el potencial es enorme”, añade. Para lograrlo, este Barça también cuenta con la estrella emergente Lamine Yamal. La relación entre el crack polaco y el talento de la Masia ha adquirido otra dimensión este año. Tanto que Lewandowski acudió a la fiesta de 18 cumpleaños de Lamine. “Lamine debe disfrutar de lo que a esta edad todavía puede. Solo hay que encontrar el equilibrio. Es un buen chico”, asegura el polaco.
La explosión de Lamine Yamal ha generado horas de insomnio, sobre todo en Madrid. Precisamente, sobre Mastantuono, considerado el nuevo Lamine de Florentino Pérez, Lewandowski tiene clara su opinión: “Lamine ha creado una necesidad. En Madrid sienten la presión de encontrar a alguien como él, pero no se puede. Igual que antes con Cristiano y Messi: eran completamente diferentes y únicos”, sentencia antes de levantarse y juguetear con el balón. El esférico siempre le hace sonreír. Por eso seguirá cumpliendo su contrato hasta junio de 2026. Después, quién sabe. En el universo de Lewandowski, la edad no importa.