Con la llegada del verano llega, también, la estampa más repetida de estos meses, cientos de personas tomando el sol en un espacio exterior. El objetivo más compartido es llegar a septiembre con una piel más bronceada, aunque también hay quienes aprovechan los meses estivales para absorber más vitamina D, que es la vitamina que el cuerpo produce naturalmente cuando está expuesto al sol.
Pero, ¿cuánto tiempo de exposición al sol se recomienda? Sobre esto ha hablado la dermatóloga Ana Molina en el podcast PeopleUPcast, tal y como podemos ver en un fragmento que han compartido el propio podcast y la especialista en su perfil de Instagram. Entre otras cosas, Ana Molina revela que no hay un tiempo único predefinido que sea bueno o malo, sino que depende de cómo sea nuestra piel.
¿Qué personas pueden permanecer más tiempo al sol?
La especialista comienza explicando que la mayoría de personas en España tienen un tipo de fototipos que hace que, en general, estemos más preparados para tomar el sol. Los fototipos permiten identificar qué capacidad tiene nuestra piel para reaccionar ante las radiaciones ultravioletas que inciden directamente del sol, según explica la Asociación Española Contra el Cáncer en su blog.
Sin embargo, esto no significa que todas las personas tengamos la misma tolerancia a la radiación solar. Por eso, la cantidad de horas que podemos estar expuestos al sol no es la misma para todos. “Cuanto más clarito eres de piel, menos minutos necesitas para sintetizar vitamina D”, explica Ana Molina en el podcast.
La dermatóloga insiste en que “nunca se puede generalizar. Cuando damos una estimación de 15-20 minutos es un reduccionismo que decimos para que la gente lo entienda, pero hay que tomar el sol según nuestro fototipo”.
Por otro lado, Molina explica que, sea cual sea el fototipo que tengamos, el sol nunca se debe tomar de cara, sino preferiblemente a través de las extremidades. Además, recuerda que es algo que no solo se puede hacer en verano, sino durante todo el año.
Cómo protegernos adecuadamente del sol
La protección de nuestra piel frente a los efectos del sol debe ser constante durante todo el año, aunque es en verano cuando sus efectos son más intensos porque la radiación es mayor. La Academia Española de Dermatología y Venereología indica que la incidencia del cáncer de piel se ha incrementado en España un 40% en los últimos años. Y, de no corregirse esta tendencia, el melanoma podría pasar a ser el segundo tumor con más incidencia global en 2040.
En este sentido, es importante saber cómo protegernos adecuadamente. Este mismo organismo aconseja utilizar fotoprotector solar específico para cada zona corporal de forma periódica, aplicándolo siempre con la piel seca unos treinta minutos antes de exponernos al sol. También es importante mantener una buena hidratación, tanto interna como externa, y evitar la exposición al sol en las horas centrales del día, que es cuando la radiación solar es más elevada.
Por su parte, la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios recuerda la importancia de utilizar crema solar también durante los días nublados, y complementar este mecanismo de protección con el uso de ropa adecuada, gorras y sombreros y gafas de sol. En definitiva, la mayoría de las veces se trata de aplicar la lógica para prevenir problemas más graves de piel en el futuro.