Los frutos secos son una fuente de nutrientes esenciales para nuestro organismo, especialmente de proteínas, minerales y fibra. Sin embargo, no a todo el mundo le sientan igual de bien al ingerirlos. Es importante distinguir entre una indigestión y otros problemas de carácter inmunológico como las alergias. En este sentido, la Asociación Española de Personas con Alergia a Alimentos y Látex (AEPNAA) estima que alrededor del 1% de la población sufre alergia a algún fruto seco. Por su parte, la Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica (SEAIC) amplía la estimación y la sitúa entre el 0,05% y el 5% de la población.
La alergia es una reacción del sistema inmunológico y, dependiendo del grado de gravedad, puede tener un tratamiento preventivo o paliativo. No obstante, la indigestión es una problemática que, en la mayoría de los casos, se puede solucionar con más facilidad. Cristina Segura, experta en nutrición, explica en un vídeo que ha publicado en su perfil de Instagram (@crisssegura_) un truco para evitar que los frutos secos produzcan una mala digestión en el estómago.
Lavar los frutos secos, ¿sí o no?
La experta en nutrición, que, además, tiene un máster en microbiota humana, explica por qué lavar los frutos secos puede reducir la sensación de indigestión que producen. En realidad, Cristina Segura defiende que el truco no solo está en lavar los frutos secos, sino también dejarlos en remojo. “Aunque parezcan limpios, pueden tener pesticidas, polvo de almacenamiento o manipulación”, explica Cristina.
Otra de las razones por las que aconseja lavar los frutos secos es para favorecer la absorción de minerales. Esto se debe a que los frutos secos contienen, de forma natural, oxalatos y fitatos, compuestos orgánicos que impiden que el cuerpo absorba adecuadamente determinados minerales.
Poner los frutos secos a remojo ayuda a eliminar estos compuestos y, por tanto, favorece la absorción de dichos minerales. Y, finalmente, Cristina Segura recalca que lavar los frutos secos “activa las enzimas y mejora la digestión. Y, si luego los tuestas, quedan brutales”.
Cómo lavar los frutos secos correctamente
Cabe destacar que no todos los expertos comparten la opinión de Cristina Segura, puesto que lavar los frutos secos también puede hacer que pierdan algunos nutrientes y que sean algo menos agradables en boca. Sin embargo, tal y como defiende esta experta en nutrición, “puede hacer que pierdan nutrientes, pero también mejora su digestibilidad y biodisponibilidad”.
El proceso para lavar los frutos secos es bastante sencillo, aunque conviene tener algunas cuestiones en cuenta. En primer lugar es importante lavarlos con agua fría. Después, lo más recomendable es dejarlos en remojo entre 6 y 12 horas. Si, además, puede ser con agua filtrada, mejor. Y, por último, es importante secarlos antes de consumirlos para que no estén demasiado reblandecidos. De hecho, Cristina recomienda secarlos a baja temperatura en el horno durante unos 15 ó 20 minutos.
En cuanto al consumo de frutos secos recomendado, la Fundación Española del Corazón aconseja ingerir entre 3 y 7 raciones semanales, teniendo en cuenta que cada ración es de unos 25 gramos de frutos secos.