Se veía venir. Incluso todo el mundo lo daba por hecho. Pero no ha sido hasta hace un par de días que de alguna manera se han confirmado dos de los romances que estaban in the air en los últimos tiempos, como ese amor que pregonaba John Paul Young. Cupido se muestra activo estas vacaciones. Y aún le quedan flechas en su carcaj. Que se vayan preparando los famosos para sucumbir a sus caprichos y también los simples mortales que seguimos sus andanzas.

Pamela Anderson y Liam Neeson con sus hijos
La química entre Pamela Anderson y Liam Neeson era innegable. Se les ha visto muy unidos en las alfombras rojas que han ido pisando para promocionar la película que coprotagonizan, el reboot de Agárralo como puedas, que este viernes se ha estrenado en Estados Unidos y que en España lo hará el 22 de agosto. La ex vigilante de la playa, de 58 años, y el protagonista de La lista de Schindler, de 73, incluso han llegado a posar junto a sus respetivos hijos, mostrándose como una familia feliz. Miradas cómplices, besos, caricias, halagos… Demasiado coqueteo ante las cámaras para que no hubiera algo más detrás de ellas, como así ha resultado ser.
El romance, no obstante, no convence a todos. Hay quien desconfía de esa flecha de Cupido que les alcanzó durante el rodaje y atribuye la incipiente relación a una campaña de marketing para impulsar la película. Sea lo uno, lo otro, o ambas cosas, lo cierto es que tanto Anderson (que desde hace un tiempo tiró a la basura el maquillaje para mostrar su madurez sin artificios) como Neeson (viudo desde hace 16 años y entregado al trabajo y a los hijos) transmiten juntos una complicidad y una alegría envidiables. Que por muchos años.

Tom Cruise y Ana de Armas en dos imágenes de archivo.
La otra pareja del verano es la formada por Tom Cruise y Ana de Armas, aunque lo suyo ya se rumoreaba desde San Valentín, cuando se les descubrió juntos en un restaurante del Soho londinense y saliendo de un hotel. Cupido se lo ha currado desde entonces. El protagonista de Misión: Imposible, de 67 años, y la Marilyn de Blonde, de 37, se han ido dejando ver en diferentes lugares, como en la fiesta del 50º cumpleaños de David Beckham, surcando las aguas de Menorca en barco o en el concierto de Oasis en el estadio de Wembley. Esta semana, no obstante, se ha captado la imagen definitiva del romance en las calles del pequeño pueblo de Woodstock. Los dos actores aparecieron paseando cogidos de la mano. Sin esconderse, relajados y confirmando lo que ya nadie ponía en duda.

El ex primer ministro canadiense Justin Trudeau y la cantante Katy Perry
En cambio, no está del todo claro si Cupido ha hecho puntería o no con Justin Trudeau, ex primer ministro canadiense, y Katy Perry, recién separada de Orlando Bloom. Primero, se les vio compartiendo una agradable cena en el elegante restaurante Le Violon de Montreal con langosta y cócteles incluidos. La cita entre la cantante, de 40 años, y el político, de 53, sorprendió y ya se empezó a hablar de un posible romance entre ellos. No obstante, los rumores se han disparado cuando se descubrió que Trudeau asistió el pasado miércoles al concierto de la estadounidense en el Bell Centre de Montreal. Sentado en primera fila, el ex primer ministro disfrutó del Lifetimes Tour de una Katy Perry que salió al escenario con todas las entradas vendidas. La intérprete permanece con su gira canadiense hasta la semana que viene. Ya veremos si Trudeau vuelve a hacer acto de presencia.

Rosalía y el diseñador Miguel Adrover
Otra cantante, Rosalía, cuyo verano, sin gira, parecía mucho más tranquilo que el de Katy Perry, se ha visto obligada a reaccionar en redes al ataque que ha sufrido de Miguel Adrover. El conocido diseñador divulgó que había rechazado vestir a la catalana por no apoyar “públicamente” a Palestina. “El silencio es complicidad”, espetó. La de Sant Esteve Sesrovires no tardó en responder a las acusaciones con un mensaje que se ha hecho viral. “El hecho de no haber usado mi plataforma de forma alineada con el estilo o expectativas ajenas no significa en absoluto que no condene lo que está sucediendo en Palestina”, aseguró. “Creo que el señalamiento debería direccionarse hacia arriba (hacia quienes deciden y tienen poder de acción) y no en horizontal (entre nosotros)”, sentenció la Motomami.

La campaña de Sydney Sweeney para American Eagle
Quien también ha recibido críticas ha sido Sydney Sweeney debido a su participación en una campaña para la marca de tejanos American Eagle. Poco se imaginaba la actriz de Euphoria que se desataría la polémica debido al juego de palabras del eslogan. Esos creativos tan ingeniosos… “Sydney Sweeney tiene buenos genes”, reza originariamente, pero la actriz tacha la palabra ‘genes’ y escribe en su lugar ‘jeans’. En inglés, ambas se pronuncian exactamente igual. La ocurrencia con estas palabras homófonas no ha hecho ninguna gracia a quienes han creído leer un mensaje supremacista viniendo de una mujer que encarna el modelo del ideal ario. Y, por si no era suficiente, en el anuncio, ella remata: “Los genes se pasan de padres a descendientes, determinando características como el color de pelo, personalidad o el de los ojos. Mis genes (o jeans, porque el juego sigue) son azules”. Los creativos quizá ni se percataron de ese otro ‘juego’ de su campaña, con un ‘azul’ que para el nazismo simbolizaba ‘sangre pura’ y pertenecer a una raza superior… O quizá sí. La duda está en el aire, como los amores de verano.

Gwyneth Paltrow en el vídeo como relaciones públicas de Astronomer
Gwyneth Paltrow, otra rubia con ojos azules, ha sido doblemente noticia esta semana. Primero, porque Astronomer, la compañía de los infieles pillados por la kiss cam de Coldplay, la ha contratado para limpiar su imagen teniendo en cuenta que es la ex del cantante de la banda. Sí, en el fondo, la vida es una gran ironía. A su vez, Chris Martin es uno de los protagonistas de la biografía no autorizada de la actriz que acaba de lanzar la prestigiosa escritora Amy Odell. El libro pone al descubierto algunos secretos de la también empresaria, repasa sus amores y sorprende mostrando la faceta menos conocida y más oscura de la actriz, con “un lado obsceno que sus amigos conocían bien, pero que la gente no veía”, asegura la autora. Menudas revelaciones.

Anne Hathaway, Meryl Streep y Emily Blunt en la secuela de 'El diablo viste de Prada'
Precisamente, Amy Odell es también autora de un libro dedicado a Anna Wintour, la poderosa dama de la moda acabada de jubilar como directora de Vogue y en la que se basa el personaje de Miranda Priestly (Meryl Streep) de la mítica película El diablo viste de Prada. Veinte años después, las mismas protagonistas han empezado a filmar una segunda parte de la historia, de la que casi cada día se filtran imágenes del rodaje, especialmente de los looks que lucen Meryl Streep y Anne Hathaway. Para ver el resultado final y si esta nueva entrega con una moda llena de influencers, redes sociales y medios digitales puede llegar a ser tan icónica como la primera, tendremos que esperar al estreno previsto para el año que viene.

Jamie Lee Curtis
Pero el tiempo pasa rápido. Incluso demasiado. Así lo han constatado esta semana dos estrellas, una de la moda y otra de la interpretación. Ambas, defensoras de un envejecimiento sin artificios. Por un lado, Jamie Lee Curtis ha cargado contra la cirugía estética. Incluso ha hablado de genocidio ya que, para ella, su uso y abuso ha comportado la desaparición de “una o dos generaciones” de personas con aspecto natural y lamenta que muchas mujeres se hayan “desfigurado a sí mismas”. Parte del problema, ha apuntado, se encuentra en el uso de filtros fotográficos. “En cuanto ves el antes y el después, es difícil no pensar: Ah, bueno, así queda mejor’. Pero, ¿qué es mejor? Mejor es falso. Y hay demasiados ejemplos”, denuncia.

Paulina Porizkova en las imágenes que compartió en las redes
Eso no le ocurre a la modelo Paulina Porizkova (60), que ha publicado en su Instagram dos imágenes de impacto. En la primera aparece espléndida en bikini durante sus vacaciones. En la segunda, en ropa interior en el baño de su casa, se muestra tal y como es, con sus arrugas e imperfecciones. “Esta también soy yo. En casa, sin buena luz, sin posar”, afirma la top model de los 80, que hace tiempo defiende un envejecimiento honesto y una belleza sin edad. Claro que sí.